
Tener la libertad de estar en un espacio propio te brinda la sensación de ser dueño de tu tiempo. Poder entrar o salir sin una restricción horaria sin duda ampliará considerablemente tu rango de posibilidades y oportunidades de todo tipo, laborales, educativas, personales, etc.
Esta libertad no solo se trata de una sensación momentánea, es una certeza. La autorrealización no se alcanza fácilmente, pero tener una casa propia es algo que ciertamente te dejará cerca del camino.